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Este viernes 11 de diciembre, desde las 09h00, cerca de 300 niños diagnosticados con leucemia y otras enfermedades de la sangre llegarán junto a sus familiares a las instalaciones de la Universidad San Francisco de Quito, donde recibirán un agasajo navideño organizado por el Colegio de Comunicación y Artes Contemporáneas COCOA.
Por quinto año consecutivo la USFQ se compromete con esta causa por medio de su campaña “Abriga Sueños”. Durante estos años, los estudiantes de la carrera de Comunicación Organizacional y Relaciones Públicas han apoyado en la recolección de fondos para adquirir pijamas, chalecos, gorros, regalos, medicinas y cualquier bien material que sea requerido por los niños en todo el proceso de su tratamiento.
Adicional a los eventos benéficos realizados por la clase de Eventos y Protocolo, tanto profesores como estudiantes de la USFQ se encuentran vendiendo bombillos navideños para recaudar una mayor cantidad de fondos en beneficio de los niños de la fundación.
El dinero recolectado estará destinado al pago de exámenes de diagnóstico inicial, los cuales son de suma importancia para combatir la enfermedad ya que determinan el nivel en que se encuentra la misma y definen el tipo de tratamiento que el menor debe recibir.
El agasajo de este año ha sido planificado para que los niños sientan la admiración de todos los estudiantes y profesores presentes, además de que disfruten de una mañana junto a sus familias. Durante la fiesta se realizarán distintas actividades como: shows infantiles, villancicos navideños, elaboración de esculturas de arcilla, caritas pintadas, juegos inflables, comida especial y obsequios para cada uno de ellos. Adicionalmente, los estudiantes de la USFQ podrán donar su cabello para la creación de pelucas entregadas a estos valientes niños.
Acerca de la Fundación Por Una Vida
Creada en Quito en 1990 por iniciativa de un grupo de personas interesadas en ayudar en su tratamiento a niños y niñas de escasos recursos afectadas por leucemia y otras enfermedades de la sangre. Desde sus inicios ha beneficiado a 1.974 pacientes menores de 15 años, apoyando a un promedio de 120 pacientes mensuales. Los tratamientos oncológicos duran entre dos y medio y tres años, con un período de control posterior de aproximadamente cinco años.
